Sistema de control de emisiones del tubo de escape
El sistema de control de emisiones del tubo de escape controla las emisiones de escape a la vez que mantiene un buen rendimiento del vehículo.
Si el motor arranca o falla al arrancar, intentarlo encender muchas veces puede causar daños al sistema de control de emisiones.
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El motor expulsa monóxido de carbono y otros gases de escape. Si huele gases de escape en el vehículo, conduzca con todas las ventanillas totalmente abiertas. Lleve su vehículo para que lo revisen y reparen de inmediato.
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No ponga en marcha el motor en sitios reducidos o cerrados (como un garaje) más tiempo del que es necesario para introducir o retirar el vehículo de la zona.
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Si el vehículo está parado con el motor en marcha en una zona abierta durante un largo periodo, ajuste el sistema de ventilación (en caso necesario) para que el aire fresco llegue al interior del vehículo.
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Nunca se siente en un vehículo aparcado o parado durante largo tiempo con el motor en marcha.
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Si el motor se cala o falla al arrancar, intentarlo encender muchas veces puede causar daños al sistema de control de emisiones.
Los gases de escape del motor contienen monóxido de carbono (CO). Aunque son incoloros e inodoros, podrían ser peligrosos e incluso letales si se inhalan. Siga las instrucciones de esta página para evitar el envenenamiento con CO.
El sistema de escape y del catalizador se calientan mucho mientras el motor está en funcionamiento o inmediatamente después de apagar el motor. Para evitar lesiones graves e incluso mortales:
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No aparque, ponga al ralentí ni conduzca el vehículo sobre objetos inflamables ni cerca de ellos, por ejemplo, hierba, vegetación, papel, hojas, etc. Un sistema de escape caliente puede prender fuego a objetos inflamables situados debajo del vehículo.
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Manténgase alejado del sistema de escape y del convertidor catalítico o corre el riesgo de sufrir quemaduras.
Asimismo, no extraiga el disipador de calor situado alrededor del sistema de escape, no selle la parte inferior del vehículo ni recubra el vehículo para el control de corrosión. Esto puede conllevar riesgos de incendio en determinadas condiciones.
Su vehículo está equipado con un dispositivo de control de emisiones del convertidor catalítico.
Para evitar que se produzcan daños en el catalizador y en el vehículo, adopte las precauciones siguientes:
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Utilice solo COMBUSTIBLE SIN PLOMO para los motores de gasolina.
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No ponga en funcionamiento el vehículo cuando existan signos de funcionamiento incorrecto del motor, tales como dificultad de arranque o pérdida notable de rendimiento.
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No haga un uso inadecuado o abusivo del motor. Ejemplos de un uso indebido son utilizar el punto muerto con el motor apagado y bajar pendientes con una marcha engranada y el motor apagado.
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No ponga el motor a una gran velocidad de ralentí durante mucho tiempo (5 minutos o más).
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No modifique ni altere ningún componente del motor o del sistema de control de emisiones. Recomendamos que todas las inspecciones y los ajustes los realice un distribuidor HYUNDAI autorizado.
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Evite conducir con un nivel de combustible excesivamente bajo.
La falta de combustible puede causar fallos de combustión del motor y, por tanto, daños en el catalizador.
Si no sigue estas precauciones, la garantía del vehículo puede quedar anulada.
El sistema del filtro de partículas de gasolina (GPF) elimina el hollín del gas de escape.
Al contrario que un filtro de aire desechable, el sistema GPF quema automáticamente (oxida) y elimina el hollín acumulado según las condiciones de conducción.
Es decir, el sistema de control del motor y una alta temperatura del gas de escape producen una quema activa en condiciones de conducción normales y altas, es decir que se quema y se elimina el hollín acumulado.
Sin embargo, cuando el vehículo se conduce continuamente en distancias cortas repetidas o a baja velocidad durante mucho tiempo, es posible que el hollín acumulado no se elimine automáticamente debido a la baja temperatura de los gases de escape. En este caso, puede acumularse cierta cantidad de hollín independientemente del proceso de oxidación, en cuyo caso se encenderá el testigo del GPF (
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La luz del filtro de partículas de gasolina (GPF) dejará de iluminarse cuando la velocidad de conducción supere los 80 km/h (50 mph) con unas rpm del motor de 1500-4000 y la marcha en la 3.ª posición o superior durante 30 minutos aproximadamente.
Cuando el testigo del GPF empiece a parpadear o aparezca el mensaje "Compruebe el sistema de escape", aunque el vehículo se haya conducido como se ha indicado anteriormente, recomendamos acudir a un distribuidor HYUNDAI autorizado para que revise el sistema GPF.
Si la luz del GPF parpadea durante un periodo de tiempo prolongado, podría ocasionar daños en el sistema GPF y reducir el ahorro de combustible.
Se recomienda utilizar únicamente combustibles de gasolina homologados en vehículos equipados con el sistema GPF.
Si utiliza otros combustibles de gasolina con aditivos no especificados, el sistema GPF podría resultar dañado y ocasionar problemas de emisión de gases de escape.