Testigo de advertencia de presión baja de los neumáticos

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Cuando se enciende el testigo de advertencia de presión baja de los neumáticos () y se muestra un mensaje de advertencia en el cuadro durante 10 segundos, uno o varios de los neumáticos están significativamente por debajo de la presión adecuada.
También se indica la posición del neumático con presión baja (si está equipado).
Si se ilumina el testigo de advertencia, reduzca la velocidad y evite girar o frenar bruscamente. Recomendamos acudir a un distribuidor HYUNDAI autorizado para que inspeccione el vehículo.
Revise el estado y la presión de inflado de los cuatro neumáticos, restablezca el TPMS (para obtener más información consulte el apartado "Restablecimiento del TPMS" de este capítulo) o tome las medidas necesarias, como reparar o cambiar los neumáticos.
Si no tiene cerca un distribuidor HYUNDAI autorizado, detenga el vehículo en un lugar seguro y revise el estado y la presión de inflado de los cuatro neumáticos. A continuación, restablezca el TPMS.
Si no puede ajustar la presión de inflado, use el kit de reparación de neumáticos (TMK) para reparar el neumático con baja presión o cámbielo por uno de repuesto (si está equipado). Recomendamos acudir a un distribuidor HYUNDAI autorizado para que inspeccione el vehículo.
Es posible que no pueda identificar a simple vista que un neumático tiene baja presión. Utilice siempre un manómetro para neumáticos de buena calidad para medir la presión de inflado del neumático. Tenga en cuenta que un neumático que está caliente (debido a la conducción) tendrá una presión más alta que la que tiene un neumático cuando está frío. Un neumático frío significa que el vehículo ha estado parado durante 3 horas y que se han recorrido menos de 1,6 km (1 mi) en dicho periodo de 3 horas. Deje que el neumático se enfríe antes de medir la presión de inflado. Asegúrese siempre de que el neumático esté frío antes de inflarlo a la presión recomendada.
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El testigo de advertencia puede permanecer encendido aunque el neumático se cambie por uno de repuesto. Los neumáticos de repuesto deben tener el mismo tamaño que los originales.
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Tenga en cuenta que el TPMS no suple un mantenimiento adecuado de los neumáticos. Es responsabilidad del conductor mantener la presión de inflado recomendada adecuada, y los neumáticos deben inspeccionarse periódicamente para mantener esta presión.
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El testigo de advertencia de presión baja de los neumáticos puede encenderse si el TPMS no se ha restablecido cuando era necesario.
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En invierno o en temperaturas frías, el testigo de advertencia de presión baja de los neumáticos podría iluminarse si la presión de los neumáticos se ajusta a la presión recomendada para los neumáticos en temperaturas cálidas. Esto no significa que el TPMS esté averiado, ya que los descensos de temperatura provocan una bajada proporcional de la presión de los neumáticos. Revise la presión de inflado de los neumáticos y ajústelos a la presión recomendada.
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El rendimiento del TPMS puede verse reducido en las siguientes situaciones:
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El TPMS se restablece de forma incorrecta.
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Se instalan neumáticos con un tamaño diferente al de los originales.
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Se conduce por carreteras abruptas, por ejemplo, con nieve, resbaladizas o sin pavimentar.
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Se gira, se acelera o se frena bruscamente de forma reiterada.
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Se conduce demasiado lento o demasiado rápido.
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El vehículo está sobrecargado.
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Se ha instalado un neumático de repuesto o cadenas para la nieve.
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La conducción continuada con unos neumáticos con una presión baja puede provocar que los neumáticos se sobrecalienten y fallen. Un inflado insuficiente puede desestabilizar el vehículo y reducir la vida útil de los neumáticos y el ahorro de combustible, aumentar la distancia de frenado y provocar otros fallos en los neumáticos que pueden ocasionar la pérdida de control del vehículo. Recomendamos acudir a un distribuidor HYUNDAI autorizado para que inspeccione el vehículo y mantener la presión de inflado recomendada.
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El TPMS no avisa de los graves o repentinos desperfectos de los neumáticos causados por los factores externos. Si siente inestabilidad en el vehículo, retire el pie inmediatamente del acelerador y pise el freno de forma gradual con una fuerza ligera y desplácese lentamente a una posición segura fuera de la calzada.